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Enmascarando Al Rey Fae
Brenda Trim


Me guste o no, debo tomar grandes riesgos si quiero salvar a los mГЎs cercanos y tener una oportunidad de liberar al resto del reino. El reloj estГЎ corriendo, y el tiempo casi se ha agotado.

Recientemente descubrГ­ que soy el Rey Fae que antes se creГ­a muerto. Pero no todo son coronaciones y revoluciones como esperaba. La Academia Bramble's Edge se estableciГі para entrenar a los Fae a controlar y ejercer su poder elemental. Y, solo he completado uno de los tres aГ±os. No tengo el poder que necesito. Tengo mГЎs poder del que esperaba y no tengo ni idea de cГіmo utilizarlo. Y mucho menos eliminar a los responsables de la muerte de mis padres antes de que lleguen a mГ­ tambiГ©n. Se corre la voz de que el rey ha vuelto, y mis amigos luchan por enmascarar mi identidad. Los responsables de la destrucciГіn de la sociedad Fae me calientan dejando a los que amo en el fuego cruzado. Maurelle y Brokk terminan quemГЎndose. Me guste o no, debo tomar grandes riesgos si quiero salvar a los mГЎs cercanos y tener una oportunidad de liberar al resto del reino. El reloj estГЎ corriendo, y el tiempo casi se ha agotado.








Enmascarando al rey Fae




ГЌndice


1. CapГ­tulo Uno (#u2de058c7-62fd-5e1d-97f3-670f93366c51)

2. CapГ­tulo Dos (#u7844ec7b-69d2-551d-a38a-9e26e59dff81)

3. CapГ­tulo Tres (#u03c241f4-3854-56e7-bf20-e7760b9aee97)

4. CapГ­tulo Cuatro (#u7015b1b8-5f78-59c6-917e-0271907f2f80)

5. CapГ­tulo Cinco (#ub4befce1-a583-5bfe-a171-a99469d998ca)

6. CapГ­tulo Seis (#u63c2acf9-2626-5f4f-8d29-8f522ae0d0af)

7. CapГ­tulo Siete (#ud7df5a19-50d4-5e7d-9c1e-6c4e3b71e47b)

8. CapГ­tulo Ocho (#u7a5af474-02e9-5f5e-8f85-ebd184e378e4)

9. CapГ­tulo Nueve (#uc7964e13-57bd-5fca-bb5e-284e0b56c401)

10. CapГ­tulo Diez (#u54dda33d-1331-5ce5-ae4b-12ee875a7abe)

11. CapГ­tulo Once (#ud5fc7bfe-0fd7-5f43-a6e2-aa356a8c5be6)

12. CapГ­tulo Doce (#uaa97e0fa-68f0-5932-bb5a-fa465c2506ec)

13. CapГ­tulo Trece (#u31cebc8d-a08d-5193-905a-312eda709531)

14. CapГ­tulo Catorce (#ub64af27d-682d-5809-ab58-e6d86add1845)

15. CapГ­tulo Quince (#u36086c25-57bd-51a7-a860-49747512bd87)

16. CapГ­tulo DiecisГ©is (#ua471f997-1c91-5da5-8b93-96efa2bfeb2b)

17. CapГ­tulo Diecisiete (#ua8d917d4-8c4e-5beb-b704-d42c569a4f4b)

18. CapГ­tulo Dieciocho (#u69e9f7dd-8a9c-557e-91cc-f1ce1eb3ad3c)

19. CapГ­tulo Diecinueve (#u4beaa7d1-dc8a-521e-a741-704a75219344)

20. CapГ­tulo Veinte (#u6024f2bc-ee86-5e26-8f1e-3184a95ec5e8)

21. CapГ­tulo Veintiuno (#u602911d1-04ad-54ac-bb45-2a12025a8020)

EXTRACTO DEL TГЌTULO DEL LIBRO AQUГЌ LIBRO # 3 REVELANDO AL REY FAE (#u9a41b5df-b19c-50dd-b969-d8f3b2c9d10e)

Nota De La Autora (#u2df8ae06-18f0-548a-991b-2fb1a68266f4)

OTHER WORKS BY Brenda TRIM (#ue74257eb-1625-5154-a072-2133329f5ab2)


Copyright В© Marzo 2020 por Brenda Trim

Editor: Chris Cain

Arte de portada de Fiona Jayde






Este libro es una obra de ficciГіn. Los nombres, personajes, lugares e incidentes son producto de la imaginaciГіn de los escritores o han sido usados ficticiamente y no deben ser interpretados como reales. Cualquier semejanza con personas, vivas o muertas, eventos reales, lugares u organizaciones es totalmente coincidente.

ADVERTENCIA: La reproducciГіn no autorizada de esta obra es ilegal. La violaciГіn criminal de los derechos de autor es investigada por el FBI y se castiga con hasta 5 aГ±os de prisiГіn federal y una multa de 250.000 dГіlares.

Todos los derechos reservados. Con la excepciГіn de las citas utilizadas en las reseГ±as, este libro no puede ser reproducido o utilizado en su totalidad o en parte por cualquier medio existente sin el permiso escrito de los autores.




Creado con Vellum (http://tryvellum.com/created)


La fuerza crece en los momentos en que crees que ya no puedes seguir, pero sigues adelante de todos modos.




CapГ­tulo Uno


—"Esto es simplemente asqueroso", refunfuñó Sol mientras sostenía una bolsa de plástico que goteaba baba marrón.

Ryker se estremeciГі y la bilis se elevГі en su garganta poniГ©ndole mГЎs enfermo de lo que ya estaba. El aire a su alrededor se volviГі violento y en vez de quitarle el hedor, lo mantuvo arremolinГЎndose bajo su nariz.

Accediendo a sus poderes elementales, intentГі alejar el viento de su cuerpo, pero lo Гєnico que consiguiГі fue aumentarlo un poco. Ahora los vientos rompieron la bolsa en sus manos y las olas aumentaron de volumen, amenazando con ahogarlas a todas. Si no tenГ­a cuidado, causarГ­a un terremoto y un incendio tambiГ©n.

Sacudiendo la cabeza, respirГі profundamente varias veces y casi vomita por sus esfuerzos. En lugar de intentar usar sus elementos, los apagГі todos. A pesar de lo poderoso que supuestamente era, aГєn no tenГ­a control sobre sus habilidades.

CentrГЎndose en la tarea que tenГ­a entre manos, preguntГі: "ВїQuiГ©n coГ±o tirarГ­a eso al ocГ©ano? Ni siquiera quiero adivinar quГ© es".

—"A los humanos no les importa lo que tiran por descuido. No tienen una conexión con los elementos como nosotros", añadió Brokk con un gruñido.

No estaba equivocado. Cualquier tipo de contaminaciГіn enferma a los Fae y debilita sus poderes elementales. Era la razГіn por la que Г©l y sus amigos estaban recorriendo el pequeГ±o tramo de la playa que los Fae podГ­an visitar. Varias veces al aГ±o, todos los residentes de Edge podГ­an ir a la costa armados con bolsas y guantes.

No era exactamente como Ryker imaginaba pasar su descanso de la academia, pero aquГ­ estaba, sin embargo. Le resultaba difГ­cil permanecer callado y no tomar medidas por su gente. Solo habГ­an pasado unas pocas semanas desde que descubriГі su verdadera identidad.

Y, apenas podГ­a comprender el verdadero significado del hecho de que era el Rey de los Fae. Era el Гєnico heredero vivo al trono de Mag Mell porque sus padres convencieron a un sirviente para que escapara y lo escondiera.

La mujer que Г©l creГ­a toda su vida que era su madre era la verdadera sirvienta de su madre. Eso no la hacГ­a menos su madre a sus ojos. No podГ­a amarla mГЎs por el sacrificio que hizo por su familia y todo su reino. Si no fuera por ella, Mag Mell estarГ­a realmente perdido.

HabГ­a pasado las Гєltimas semanas intentando demostrarle cuГЎnto la amaba ayudГЎndola en su trabajo. Estaba prГЎcticamente pegado a su lado desde que empezГі el descanso de fin de aГ±o. ResultГі ser lo mejor en mГЎs de una ocasiГіn. Casi le habГ­an robado, pero Ryker estaba allГ­ para salvarla a ella y a su dinero duramente ganado.

NegГЎndose a pensar en el peligro que su madre corrГ­a a diario, se concentrГі de nuevo en la tarea y la conversaciГіn que tenГ­a a mano. Si seguГ­a obsesionado con Galina, no podrГ­a volver a la Academia Bramble's Edge en un par de dГ­as como se suponГ­a que debГ­a hacer.

No iba a terminar con un montГіn de alas rotas en su segundo aГ±o. Pudo haber matado a su malvada directora a finales del aГ±o pasado, pero no fue tan estГєpido como para creer que era el fin de la manipulaciГіn y los problemas.

El intento de la escuela de ayudar a los Fae a afinar su control sobre los elementos fue pervertido de su propГіsito original para poder crear esclavos sin sentido para los humanos. El instinto de Ryker le dijo que habГ­a mГЎs que eso, pero no tenГ­a ni idea de cuГЎnto mГЎs. Sin embargo, la corrupciГіn se le quedГі grabada como una espada de doble filo. DespuГ©s de todo, su bisabuelo creГі la academia para evitar el caos y la catГЎstrofe cuando los Fae no entrenados desataron accidentalmente sus elementos.

—"Y, el consejo lo permite", intervino Ryker. "Tenemos que hacer algo al respecto antes de que perdamos más de nuestro reino".

Daine, Brokk y Sol se le acercaron con el ceГ±o fruncido. La forma en que escudriГ±aron sus alrededores le dijo a Ryker que les preocupaba que alguien hubiera oГ­do lo que dijo. Los guardias se alineaban en el ГЎrea donde la arena se encontraba con el camino de piedra que llevaba al Edge. Otro grupo hizo guardia junto al muro de ladrillos que separaba las playas de Furness. La antiestГ©tica fachada bloqueaba completamente Dornwich. ParecГ­a que los humanos no querГ­an que se les recordara a quiГ©n habГ­an robado su tierra.

—"Cuidado, hermano", advirtió Brokk. Durante el año pasado, Ryker se había hecho tan amigo de sus compañeros de residencia que los consideraba de los pocos en los que confiaba. Planeaba nombrarlos su guardia del Rey cuando finalmente tomara la corona. No tenía ninguna duda de que sus amigos se tomarían el trabajo en serio. "No tienes ni idea de quién puede oírte aquí."

—"¿Cómo puedes soportar esta mierda? Estoy tan cansado de quedarme parado cuando puedo hacer algo", respondió Ryker en voz baja.

—"Lo sé, pero tenemos que hacerlo. ¿Recuerdas lo que tu madre y Shiloh dijeron? Vayamos a limpiar cerca de los acantilados", sugirió Daine. "Será más seguro allí".

Asintiendo con la cabeza, el cuarteto volviГі a recoger la basura. Aguantando la respiraciГіn, Ryker recogiГі restos de lo que parecГ­a ser un par de pantalones. Estaban destrozados y manchados. Era imposible determinar el origen de las manchas, pero no habГ­a duda de que las garras o las cuchillas habГ­an ido a la ciudad en la prenda.

MetiГ©ndola en la bolsa, continuГі recogiendo basura mientras se preguntaba cГіmo podГ­an crear tanta basura en un par de meses. Los Fae nunca pasaron mucho tiempo sin limpiar la zona. No podian. Envenenaba todo su ser.

Levantando la cabeza, escudriГ±Гі la orilla y vio a los niГ±os ayudando a sus padres. Incluso los ancianos hicieron su parte. La ira consumiГі a Ryker, haciendo que sus miembros temblaran. La energГ­a burbujeaba en su pecho, diciГ©ndole que habГ­a activado el manto del rey de alguna manera.

Cuando sondeГі la zona, todavГ­a habГ­a una burbuja rodeando la energГ­a, pero estaba presionando la barrera en busca de una forma de liberarse. Sin duda querГ­a hacer algo para ayudar al sufrimiento de su pueblo.

Puede que sea una locura, pero Ryker vio el manto como una entidad separada. Estaba en el proceso de integrarse con Г©l, y con Г©l llegГі la certeza de que su prioridad y propГіsito era el bienestar de todas las criaturas Fae.

—"¿Qué carajo?" Brokk se puso brusco, haciendo que Ryker cambiara su mirada. Todos los que estaban recogiendo basura se dirigían a su grupo.

Probando una teorГ­a, Ryker se alejГі varios pasos de sus amigos. Su mandГ­bula cayГі en su pecho cuando el grupo cambiГі de direcciГіn y se dirigiГі hacia Г©l. Su mente estallГі con un millГіn de pensamientos a la vez.

CentrГЎndose en lo mГЎs importante, Ryker mirГі a los policГ­as y notГі que sus ojos estaban sobre Г©l. No es la atenciГіn que necesitaba en este momento. Sin molestarse en quitarse el guante de lГЎtex sucio, metiГі la mano en el bolsillo y apretГі el talismГЎn mientras se obligaba a pensar en Maurelle.

En segundos, los que se dirigГ­an a Г©l se detuvieron y despuГ©s de mirar alrededor reanudaron su tarea. Un suspiro de alivio saliГі de sus labios y retirГі su mano, dejando el amuleto en su bolsillo.

Mientras se dirigГ­a hacia los acantilados, Ryker permitiГі que su mente viajara de vuelta a la hembra sexy que consumГ­a sus sueГ±os y casi todos sus pensamientos despiertos. Los tormentosos ojos grises de Maurelle siempre se oscurecГ­an con su excitaciГіn. Pensar en ella normalmente le levantaba el ГЎnimo y mГЎs.

Dispuesto a que su polla se comportara, Ryker se permitiГі pensar mГЎs en el culo atrevido y los pechos perfectos de Maurelle. HacГ­a mucho tiempo que no la besaba, y mucho menos que no hacГ­a nada mГЎs. La echaba de menos como un loco y ella era lo Гєnico que esperaba cuando pensГі en volver a la academia.

El fuerte hilo que le unГ­a a Г©l y a Maurelle palpitaba casi tanto como el manto. Lo mantenГ­a cuerdo y conectado a la tierra. Y le daba una razГіn para seguir escondiГ©ndose. No pondrГ­a ni un solo pelo rosa en su cabeza en peligro de ser daГ±ado. HarГ­a cualquier cosa para asegurar que ella estuviera a salvo.

Una rГЎpida mirada a sus amigos le recordГі la advertencia que la Peridun le habГ­a dado hace semanas. ВїCГіmo podГ­a pedirle que incorporara a estos machos en su relaciГіn con Maurelle? Le habГ­a tomado dos dГ­as para que su rabia disminuyera lo suficiente como para pensar bien despuГ©s de escuchar a Shineah proclamar que necesitaba abrir su relaciГіn a sus amigos.

Odiaba la idea de compartir a Maurelle, pero empezaba a ver la sabidurГ­a detrГЎs de ello. Y si estaba siendo honesto, estaba intrigado.

Shineah no le dio la razГіn por la que necesitaba expandir su cГ­rculo Г­ntimo, pero tenГ­a la sensaciГіn de que tenГ­a que ver con mantenerla a salvo. No estaba claro si serГ­a capaz de seguir ocultando quiГ©n y quГ© era. Para ahorrarle a Maurelle y a sus amigos todos los problemas posibles en caso de que se filtrara su verdadera identidad, Ryker pensГі en compartirla con los machos que lo rodeaban actualmente.

Los Fae eran seres apasionados que necesitaban intimidad. Nadie en el Edge juzgaba o degradaba a los demГЎs por permitirse el sexo. Eso se dejaba a los humanos. Vieron a los de su clase como seres repugnantes sin moral. Eso no podГ­a estar mГЎs lejos de la verdad. La intimidad era una indulgencia natural de sus necesidades fГ­sicas.

No habГ­a nada malo en dar y recibir placer con participantes dispuestos. No habia tal cosa como la violacion o el coito forzado con los Fae. De nuevo, forzar a otro solo ocurrГ­a con los humanos. Cuando no negabas y reprimГ­as tus necesidades, no se apoderaban de ti y corrompГ­an tu comportamiento. Tampoco, podian ser retorcidos en algo antinatural y cruel.

A Ryker no le gustaba necesariamente la idea de compartir a Maurelle, pero cuando la idea se le ocurriГі, se sintiГі bien de alguna manera. Nadie sospecharГ­a que el rey compartirГ­a voluntariamente su hembra con otros. Hacerlo no solo desviarГ­a la atenciГіn de su realeza, sino que protegerГ­a a los que le importaban.

La sangre de Ryker se calentГі y su eje se endureciГі al pensar que la boca de Maurelle se movГ­a sobre el eje de Brokk o los labios de Sol. No, no odiaba para nada la idea de los seis juntos. Lo conmoviГі hasta el alma. HabГ­a sido tan posesivo con ella desde el momento en que la vio. ВїQuГ© habГ­a cambiado ahora?

Era el vГ­nculo que compartГ­a con ella, se dio cuenta de repente. Ni siquiera podГ­a considerarlo antes cuando habГ­a luchado contra cualquier atracciГіn hacia ella. HabГ­a una silenciosa batalla entre querer acercarse a ella y mantenerla a distancia que consumГ­a toda su atenciГіn. Cuando finalmente cediГі, pasГі mucho tiempo tratando de compensar por haberla tratado mal.

—"No puedes hacer una mierda así, Ryk", dijo Sol con los dientes apretados.

Sacudiendo la cabeza para aclarar los pensamientos y calmar su cuerpo, Ryker metiГі un tronco de carne medio comido en su bolsa. "No fue intencionado. Ni siquiera sГ© lo que pasГі".

—"¿La cosa que Shineah te dio para ocultar tu falta de realeza?", preguntó Brokk. Ryker inclinó la cabeza hacia un lado. Brokk no era el más elocuente de los hombres, pero era tan leal como ellos. Ryker le confió su vida, y posteriormente la de todos los Fae.

La verdad era que ninguno de ellos entendГ­a mucho de lo que estaba pasando. No se molestaron en intentarlo la mayorГ­a de los dГ­as. Les costГі toda su energГ­a proteger y ocultar la verdadera identidad de Ryker mientras actuaban como si nada estuviera mal.

—"No. Puedo sentirlo rodeando mi poder como una burbuja, pero cuando me cabreo empuja esos límites", admitió Ryker.

La risa de Daine era tensa. "Shineah necesita darte algunas hierbas para mantener tu mierda en calma."

—"Vete a la mierda", respondió Ryker con una sonrisa antes de agacharse y recoger más basura.

El ruido asustГі a su grupo y sus cabezas se agitaron. Todos exploraron los acantilados mientras Ryker susurraba: "ВїVes algo?"

—"No", murmuró Sol en voz baja.

—"¿Hay alguna cueva por aquí?" Preguntó Brokk, con una voz más fuerte que la de los demás.

Ryker nunca pasaba mucho tiempo en la playa y cuando estaba allГ­, pasaba su tiempo en el agua. ConectГЎndose con su elemento terrestre, enviГі un chorro de energГ­a mientras trataba de detectar cualquier abertura.

Nunca habГ­a intentado hacer esto antes y ni siquiera estaba seguro de que fuera posible. Este era el tipo de tarea que los Fae de su edad necesitaban que la academia les enseГ±ara. Este aГ±o le enseГ±arГ­a mГЎs sobre las habilidades y limitaciones de sus elementos. Era otra razГіn por la que iba a volver. Necesitaba desesperadamente este conocimiento para convertirse en un Rey efectivo, pero no era su principal razonamiento. Estar cerca de Maurelle sГ­ lo era.

Cuando la sensaciГіn de roca sГіlida regresГі despuГ©s de lanzar el poder a la cara de la roca, Ryker se sintiГі aliviado. Continuando con el lanzamiento de su poder elemental, se detuvo cuando golpeГі un ГЎrea que estaba hueca.

—"Ahí", dijo Ryker mientras señalaba un área a pocos metros de distancia.

El grupo se dirigiГі a investigar. Al principio Ryker pensГі que se equivocaba al pensar que era una cueva, hasta que llegaron a la secciГіn. HabГ­a una abertura entre dos capas de roca que estaban en ГЎngulo, por lo que estaba escondida.

El frГ­o se deslizГі por la columna vertebral de Ryker al acercarse a la cueva. "Tal vez no deberГ­amos entrar ahГ­", advirtiГі Daine cuando Ryker se dirigiГі al interior.

Mirando por encima de su hombro, se encogiГі de hombros. "Si hay algo dentro, no son los humanos o los policГ­as. ВїQuГ© tan peligrosos pueden ser? Tal vez sean parte de la resistencia que se esconde".

Uno de sus amigos respirГі hondo cuando Ryker entrГі en la oscura y hГєmeda cueva. Un olor a moho se le metiГі en la nariz, pero no era tan malo como los desechos que habГ­an estado recogiendo toda la maГ±ana.

Una rГЎpida mirada alrededor le dijo que el espacio no era muy profundo y que estaba vacГ­o. "Fuera cual fuera el ruido, no venГ­a de aquГ­. ВїDetectaste algo mГЎs?" preguntaba Sol.

Ryker se volviГі hacia Г©l y tropezГі cuando algo duro le golpeГі por detrГЎs. Se sentГ­a como una especie de tabla. Un grito saliГі de su garganta y antes de que se agarrara a la pared, escuchГі gritos y carne golpeando carne.

El aire detrГЎs de Г©l soplГі a travГ©s de su cuello, haciendo que Ryker se agachara antes de que hiciera otro movimiento. Algo se estrellГі contra la roca que estaba encima de Г©l. Por los sonidos de la colisiГіn, parecГ­a como si quien le atacara golpeara la tabla contra la pared. Le llovieron fragmentos de esquisto a su alrededor mientras levantaba los brazos para cubrirse la nuca y la cabeza.

PoniГ©ndose de pie, Ryker se encontrГі cara a cara con un centauro enfadado. El medio caballo medio hombre le gruГ±Гі y levantГі un maltrecho trozo de madera sobre su cabeza. Bajando a una posiciГіn de lucha, Ryker cargГі contra la bestia. Su hombro golpeГі al centauro en la parte baja del pecho. Se levantГі sobre sus patas traseras y le pateГі las delanteras.

Una pezuГ±a se conectГі con el pecho de Ryker y algo se rompiГі. Respirar instantГЎneamente se hizo casi imposible. Sibilante, bailГі para evitar otro golpe y recogiГі la tabla que el centauro dejГі caer.

Al tirar de ella hacia atrГЎs, la agonГ­a se desatГі en su pecho. Ignorando la incomodidad, Ryker balanceГі el arma improvisada y golpeГі la pata delantera del centauro. Un fuerte chasquido resonГі en la cueva antes de que el hueso se rompiera a travГ©s de la gruesa piel.

La sangre brotГі y la bestia cayГі en un montГіn. Antes de que Ryker pudiera terminar el trabajo, grandes manos gris verdosas aterrizaron en sus hombros y en el siguiente segundo estaba volando por los aires. GolpeГі sus alas para intentar detener su impulso, pero no habГ­a esperanza. Se movГ­a demasiado rГЎpido.

En la confusiГіn del movimiento, vio al troll acercГЎndose a Г©l. Cuando Ryker cayГі al suelo, pensГі que se habГ­a preparado para el dolor en el pecho, pero no habГ­a forma de que se preparara para la agonГ­a.

PoniГ©ndose de pie, Ryker se envolviГі el pecho con un brazo. Y levantГі la madera con el otro. AcorazГЎndose hacia el troll, usГі sus alas para mantener el equilibrio. La madera se uniГі con un muslo del tamaГ±o del tronco de un ГЎrbol y sacudiГі todo su cuerpo.

—"¿Qué coño queréis?" le gritó a los Fae que los atacaban. Brokk luchó contra un vampiro mientras Daine luchó contra un barghest, y Sol se enfrentó a otro centauro.

ВїEran estos seres de los tГєneles bajo el Edge? El aГ±o pasado los estudiantes fueron enviados a los tГєneles para una de sus pruebas. Maurelle casi muere en las alcantarillas. Ryker estaba seguro de que el consejo usaba a los estudiantes para controlar a la poblaciГіn de allГ­ abajo, asГ­ que no se le fue de las manos.

—"Nos has convocado, Rey Fae", dijo el troll con una voz que sonaba a grava.

Ryker se echГі hacia atrГЎs y su brazo con el arma bajГі. "ВїDe quГ©, en nombre de los Dioses, estГЎs hablando? No soy el Rey. Г‰l y su heredero fueron asesinados hace dГ©cadas".

La lucha habГ­a parado con sus preguntas. El troll mirГі a los otros con la cara arrugada en una clara confusiГіn. El vampiro hundiГі sus colmillos en el cuello de Brokk y se echГі hacia atrГЎs.

Brokk gritГі en el instante en que fue mordido y se las arreglГі para agarrar la cabeza del vampiro antes de que le arrancara la garganta. Con un giro brusco, le rompiГі el cuello al vampiro. Eso no matarГ­a a la criatura, pero lo incapacitГі por el momento.

La acciГіn hizo que Ryker se moviera y saltГі sobre el troll. LevantГі su mano en el aire y la apuntГі a la cara del troll. El impacto detuvo su movimiento. Tanto Г©l como el troll cayeron en un montГіn al suelo. Su pecho estaba en llamas cuando uno de los grandes brazos del troll cayГі sobre su cuerpo.

Las pisadas sonaron fuertemente en la tierra, diciГ©ndole a Ryker que alguien se dirigГ­a hacia Г©l. Empujando con todas sus fuerzas, se las arreglГі para mover el miembro muerto lo suficiente para salir de debajo del troll. El arma saliГі de la cuenca de un ojo.

NecesitГЎndola para defenderse del centauro herido que se dirigГ­a cojeando hacia Ryker, se subiГі al pecho del troll y agarrГі el arma. La urgencia le hizo verter mГЎs fuerza en la acciГіn y la madera se liberГі tan repentinamente que los brazos de Ryker volaron sobre su cabeza.

En lugar de volver a bajar, el arma golpeГі a otro objetivo con un sonido hГєmedo. No tenГ­a por quГ© saber que le habГ­a dado al centauro. Era la Гєnica criatura que quedaba en la cueva que no estaba comprometida con sus amigos. El medio caballo medio hombre cayГі al suelo y Ryker tropezГі con el pecho del troll muerto.

Brokk tenГ­a una mano sujeta a su garganta para detener la hemorragia. Sol y Daine lucharon contra el barghest y el centauro. Ryker se uniГі a Daine cuando su amigo hizo un movimiento que lo hizo voltear por el aire y aterrizar sobre la espalda de la criatura. Sin dudarlo, Daine se agarrГі a los lados de su cabeza y se retorciГі.

Daine montГі la espalda del centauro cuando se derrumbГі en el suelo y arrebatГі una roca de la tierra al mismo tiempo que se alejaba de la bestia inconsciente. Daine levantГі la roca y atravesГі el cuello del centauro, separando su cabeza de su cuerpo.

La adrenalina hizo que Ryker rebotara en las puntas de sus pies. Sol acabГі con el barghest destrozando su crГЎneo con una roca. Estos amigos no dudaron en defenderlo. HabГ­a elegido bien su guardia.

SabГ­an, sin necesidad de que se les dijera, que nadie fuera de su pequeГ±o cГ­rculo podГ­a quedar vivo si conocГ­an su verdadera identidad. HabГ­a pocos a los que pudiera confiar ese conocimiento, pero los tres machos que estaban en la cueva con Г©l estaban entre ellos.

—"Tenemos que deshacernos de los cuerpos", dijo Brokk en el silencio.

—"¿Cómo diablos hacemos eso sin levantar sospechas?" Exigía Sol.

—"Volvemos esta noche. A nadie le importarán unos cuantos Fae muertos", declaró Ryker con una mueca en su cara. Fueron momentos como estos los que le hicieron querer despotricar y despotricar contra el destino.

No estaba bien que su gente sufriera en la pobreza mientras sus opresores eran libres de vivir una vida de lujos. Los siguientes dos aГ±os en la academia no pudieron pasar lo suficientemente rГЎpido.




CapГ­tulo Dos


—"¿Tendrás cuidado y mantendrás la cabeza baja?" El padre de Maurelle, Zephos, preguntó mientras la abrazaba con un fuerte abrazo. No se había alejado de su lado todo el tiempo que ella estuvo en casa. Había estado trabajando desde casa desde que su madre fue asesinada.

Sin duda tiene miedo de dejar a sus hermanas solas. Perder a su pareja de esa manera fue traumГЎtico y dejГі su marca. Su padre habГ­a envejecido varias dГ©cadas durante el aГ±o en que ella se fue. La alegrГ­a que normalmente emanaba de Г©l estaba ausente. Maurelle entendiГі su necesidad de estar cerca de ellas y no luchГі con Г©l cuando insistiГі en acompaГ±arla de vuelta al campus.

Era surrealista estar de pie fuera de la Academia Bramble's Edge despuГ©s de visitar su casa para el descanso de fin de aГ±o. Le quedaba un aГ±o y dos por delante. Las lГЎgrimas se acumularon en sus ojos y su garganta se quemГі con la emociГіn que estaba reteniendo.

DespuГ©s de varios meses tuvo la oportunidad de llorar la pГ©rdida de su madre con su padre y hermanas. Nadie hablГі de la razГіn de su muerte. Estaban demasiado asustados por las repercusiones. De ahГ­ la razГіn de las palabras de advertencia de su padre.

Tantas veces, durante las Гєltimas semanas, quiso decirles que el rey habГ­a regresado y que pronto dejarГ­an de vivir con el terror. Maurelle tenГ­a que creer que Ryker descubrirГ­a a los culpables y quitarГ­a el control humano de su reino. No estaba en posiciГіn de tomar el control todavГ­a.

TenГ­a mucho que aprender, por eso se mantenГ­an callados. Si los poderes supieran quiГ©n era realmente, lo matarГ­an inmediatamente. Y, hasta que no tuviera un mejor control sobre sus elementos, estaba en riesgo.

Le estaba matando tener que guardarse esta informaciГіn para sГ­ mismo. MГЎs que su familia se alegrarГ­a mucho de oГ­r la noticia. La mierda que escondГ­a cambiaba el juego para su gente, y eso era lo Гєnico que mantenГ­a la boca cerrada. Me doliГі ver a tantos sufriendo.

Maurelle necesitaba tomar medidas. Era una fuerza que burbujeaba en su alma, haciГ©ndola irritable. Gullvieg estaba muerta. Es hora de localizar el resto de la estructura de poder corrupta. Sin embargo, la madre de Ryker les advirtiГі hasta que Г©l estuviera en su mejor momento. Hasta entonces, los que lo querГ­an muerto representaban un riesgo demasiado grande.

Golpeando sus manos con los puГ±os, metiГі los impulsos en el lodo de su mente y los bloqueГі.

—"Sí, padre. Planeo asistir a clases y mantener la cabeza baja", prometió.

—"¿Es ese tu novio?" Su hermana Erlina lo soltó. "¿O estás saliendo con todos ellos?"

Girando la cabeza, Maurelle vio a Ryker dirigiГ©ndose hacia ellos con Brokk y Sol. Una sonrisa floreciГі en su rostro y les hizo un gesto con la mano. "Somos amigos. Creo que yo le gusto a Ryker, pero no a los demГЎs", negГі. Cuando mirГі a Ryker y luego a los otros, el calor se desplegГі en su interior, despertГЎndola y tentГЎndola.

—"Por lo que parece, le gustas tanto como tú", bromeó Nyx. "Todos lo hacen. ¿Por qué no me dijiste que te acostabas con todos ellos?"

La cabeza de Maurelle se rompiГі y sus ojos se entrecerraron, pero antes de que pudiera corregir a su hermana, su padre hizo un ruido de asfixia. "Prefiero creer que todavГ­a eres mi bebГ©. Eso es demasiado para que lo maneje un hombre viejo como yo".

—"No voy a dormir con todos ellos, papá. Está equivocada", insistió Maurelle. Aún no, una parte de su mente susurró. La idea no era del todo repulsiva. Eran todos machos guapos, pero parecía equivocado que una parte oculta de ella los quisiera a todos. Negándose a complacer más los pensamientos, se concentró en Ryker y su conexión con él.

—"No es que fuera un escándalo si ella fuera", continuó Erlina. "Hay muchas líneas que han estado involucradas en los harenes. La mayoría de ellos son de clase alta o real, pero también ocurre en la clase baja como nosotros".

La charla de Erlina sobre los Fae reales hizo que Maurelle moviera sus pies y se retorciera las manos. Los vientos enviaron hilos rosas de su pelo a su cara. Con una mano impaciente, se lo arrancГі de los ojos y tratГі de calmarse. Cada vez que estaba excitada o enojada o frustrada, sus elementos escapaban a su control.

—"Hola chicos", llamaba a Ryker, Brokk y Sol para desviar la conversación. No podía permitir que su padre siguiera pensando en eso. Sería un desastre si el secreto de Ryker saliera a la luz. "Papá, estos son Ryker, Brokk y Sol. Ryker y Brokk están en mi liga y Sol es su compañero de cuarto. Este es mi padre Zephos".

El padre de Maurelle extendiГі su mano. "Es un placer conocerte. Hemos oГ­do mucho sobre vosotros".

Ryker se agarrГі los antebrazos con su padre y le devolviГі el saludo. "Encantado de conocerte, Zephos. Siento no haberte conocido antes. Estaba ocupado ayudando a mi madre durante el descanso". A pesar de descubrir que Galina no era su verdadera madre, Ryker no permitiГі que eso disminuyera su afecto por ella.

Su amor por Galina hizo que el corazГіn de Maurelle se derritiera en lo que a Г©l respectaba. La hembra habГ­a sacrificado todo para cuidarlo y esconderlo, y Г©l iba a asegurarse de que ella fuera recompensada a cambio. Maurelle sabГ­a que Г©l querГ­a proporcionarle seguridad y comodidad por encima de todo, pero estaba haciendo todo lo que estaba a su alcance en ese momento para cuidar de ella.

Brokk y Sol saludaron a su padre y antes de que se diera cuenta, se estaban despidiendo de su familia. Dando a su padre y a sus hermanas un Гєltimo abrazo, ella los abrazГі a cada uno de ellos. "Cuida de papГЎ", le dijo a Nyx y Erlina se girГі para entrar en la academia.

—¿Cómo era su vida? El destino era una perra voluble. Primero le quitó a su madre y luego le dio la salvación de su pueblo mientras que al mismo tiempo puso al rey Fae y a ella misma en el punto de mira de una malvada directora de la Academia.

ВїPor quГ© no pudieron tender una emboscada al castillo para que Ryker tomara su legГ­timo lugar en el trono? MatГі a Gullvieg y dio un golpe a los gilipollas que controlaban a los Fae. Fue mГЎs que frustrante tener que esperar. Mag Mell lo necesitaba ahora mГЎs que nunca. Solo los dioses sabГ­an cuГЎnto tiempo durarГ­an aquellos a los que ella amaba y cuidaba. La muerte era demasiado comГєn para los Fae.






Ryker extendiГі la mano y retorciГі los dedos con Maurelle. Necesitaba el contacto para no actuar precipitadamente. Solo porque su madre habГ­a dado todo para asegurar que sobreviviera y creciera para ser un rey poderoso cuando llegara el momento.

Su mente aГєn luchaba por comprender lo que habГ­a aprendido. Era el Гєnico heredero vivo del trono Fae. En todo Mag Mell, era el Гєnico ser que podГ­a unir a los suyos y derrocar a los humanos.

Pero no eran solo los humanos el problema. No eran capaces de controlar y obligar a poderosos seres elementales a cumplir sus Гіrdenes. Se necesitarГ­a un usuario de la magia para lanzar los hechizos y mantenerlos suprimidos.

Todo lo que se necesitaba para afianzarse entre las masas era el trauma de perder a su rey y reina. Ryker habГ­a descubierto que los que estaban en el poder usaban hechizos y pociones en la comida para evitar que los Fae se liberaran.

—"¿Estás listo para esto?" preguntó Maurelle. Cuando Ryker la miró, le devolvió la sonrisa y le llevó sus manos juntas a los labios.

Presionando un beso en el dorso de su mano, disfrutГі del cosquilleo que se extendiГі por su boca. "No realmente. ВїHas oГ­do quiГ©n ocupa el lugar de Gullvieg?"

Brokk se dio la vuelta y caminГі hacia atrГЎs mientras se unГ­a a la conversaciГіn. "Mis padres me dijeron que un hombre llamado Gaius fue nombrado como el nuevo director".

—"¿Sabes algo sobre este hombre?"

Brokk mirГі a Ryker y sacudiГі la cabeza. "Lo Гєnico que me dijeron es que es un gran partidario del jefe".

Ryker considerГі esa informaciГіn. El jefe de los policГ­as era el principal enlace entre los Fae y los humanos. Si alguien era corrupto, tenГ­a que ser ese tipo. Eso era lo Гєltimo que necesitaba cuando trabajaba duro para mantenerse oculto.

—"Perfecto", gruñó Ryker. "¿Crees que está dirigiendo la Unidad Bravo?" Recordó la liga secreta de asesinos que Gullvieg reclutó para él y Brokk.

—"Espero que no", dijo Brokk cuando se dio la vuelta.

Ryker tambiГ©n lo hizo. FrotГЎndose la nuca con la mano libre, estirГі las alas. Con el grado de peligro que lo rodeaba, no se habГ­a relajado en meses.

Una mirada por encima de su hombro hizo que parte de la tensiГіn saliera del cuerpo de Ryker. Como todos los Fae, sus alas brillaban sutilmente ahora porque habГ­a llegado a su poder, pero las marcas que las cubrГ­an estaban ocultas. Si eran visibles, entonces le dirГ­an a todo el mundo que Г©l era el rey. Ryker sabГ­a que su madre y su tГ­a tenГ­an razГіn cuando dijeron que no podГ­a dejar que nadie lo supiera todavГ­a.

Su control sobre los elementos era muy dГ©bil en el mejor de los casos. Todos los Fae de su edad entraron en sus poderes cuando alcanzaron entre dieciocho y veintitrГ©s aГ±os de edad. En ese momento, fueron enviados a la Academia Bramble's Edge para perfeccionar sus habilidades.

Los Fae sin la habilidad de controlar sus elementos hicieron una sociedad volГЎtil. Si hubiera un grupo de jГіvenes adultos quemando edificios, causando incendios, inundaciones repentinas y terremotos, reinarГ­a el caos. La universidad fue diseГ±ada para enseГ±arles a controlar. Solo en los Гєltimos veinte aГ±os mГЎs o menos su propГіsito se ha pervertido.

Ahora se utiliza para moldear y dar forma a los Fae para que sean esclavos para el mejoramiento humano. Ryker descubriГі el aГ±o pasado pociones en la comida que se usaban para hacerlas mГЎs dГіciles y fГЎciles de manipular. Embotaba sus emociones y los hacГ­a susceptibles a las influencias externas.

Pensando en su necesidad de la academia, Ryker se recordГі a sГ­ mismo que tenГ­a que tener cuidado con lo enfadado que se ponГ­a. Гљltimamente, habГ­a estado influenciando a los que le rodeaban cuando sus emociones eran altas. Ayer mismo se enojГі cuando alguien tratГі de tomar el bolso de su madre. DescubriГі esa pequeГ±a pepita cuando hablaba con Babel fuera de su panaderГ­a para arreglar la putrefacciГіn de su ventana.

Estaba observando a su madre y notГі que un centauro agarraba su bolso y empezaba a despegar. Por rabia le gritГі al tipo que se detuviera. Ya se estaba alejando del culpable; Ryker se quedГі atГіnito cuando el centauro se detuvo tan repentinamente que sus patas traseras casi volaron sobre su cabeza.

Shineah le dijo que era el manto del rey creciendo y expandiГ©ndose. Le dio un talismГЎn mГЎs poderoso para amortiguar su calor. No se dio cuenta de lo que estaba pasando antes de eso. HabГ­a asumido que era su frustraciГіn por tener que ocultar quiГ©n era. DespuГ©s de recibir el amuleto, en lugar de que su pecho estuviera en ebulliciГіn, hirviГі a fuego lento

La familiar extensiГіn de cГ©sped se abriГі en el momento en que el camino terminГі. Ryker se puso tieso y Maurelle se estremeciГі en el momento en que cruzaron la barrera de la academia.

—"¿Qué carajo fue eso?" Brokk se ha desdibujado.

Sacudiendo la cabeza, Ryker mirГі a su alrededor y notГі que los estudiantes detrГЎs de ellos tenГ­an una reacciГіn similar. "Ni idea, pero no fue agradable".

Maurelle soltГі su mano y se frotГі los brazos. "PensГ© que estarГ­a bien aquГ­ ya que mataste a Gullvieg", susurrГі Maurelle.

—"No estaremos a salvo hasta que pueda recuperar mi trono y erradicar a los que jugaron un papel en la muerte de mis padres", respondió Ryker en una voz baja que solo llegó a Maurelle y a Brokk.

Su grupo se quedГі en silencio mientras los estudiantes pasaban corriendo por delante de ellos y se dirigГ­an al salГіn principal para la asamblea de bienvenida. El estГіmago de Ryker se retorciГі mientras mantenГ­a la puerta abierta para que Maurelle entrara. Las conversaciones resonaban en la entrada abierta, haciendo parecer que habГ­a diez veces mГЎs estudiantes este aГ±o.

Cuando entraron en la cafeterГ­a, Ryker vio por primera vez al nuevo director. El macho estaba de pie con los brazos cruzados sobre un pecho musculoso. Retirado, habГ­a anticipado que Gaius estarГ­a en las Гєltimas etapas de su vida como Gullvieg. Los Fae vivieron durante cientos o miles de aГ±os y no mostraron su edad hasta los Гєltimos dos siglos.

El nuevo director no tenГ­a canas en su pelo blanco-rubio y sus claros ojos azules. Estaba claro que todo el cuerpo estudiantil esperaba un anciano tambiГ©n. Todos estaban boquiabiertos por la forma en que sus bГ­ceps se agrupaban cuando se movГ­a.

—"Tomen asiento", exigió Gaius con una voz estridente mientras su mirada recorría la sala.

Todos se apresuraron a cumplir. Ryker y su grupo alcanzaron a Daine en su mesa habitual. Las pantallas de ordenaciГіn aparecieron con un saludo un segundo antes de que Gaius comenzara a hablar.

—"Bienvenidos de nuevo estudiantes y personal", comenzó Gaius. El hombre tenía un ceño fruncido perpetuo o estaba enfadado. No había frivolidad en ningún lugar de su rostro. "Como sus padres le habrán dicho durante el descanso. El consejo ha tomado medidas para asegurar su seguridad mientras estén en la academia".

—"Sí, claro", murmuró Brokk en voz baja. Ryker le dio un puñetazo en el brazo y sacudió la cabeza.

Ignorando el ceГ±o fruncido, Ryker se concentrГі en el nuevo director. "HabrГЎ seguridad extra patrullando el terreno. No permitirГ© que otro Fae sea asesinado en este campus".

Gaius mirГі fijamente y levantГі una esquina de sus labios en un gruГ±ido. Ryker querГ­a hundirse en su silla. ParecГ­a como si el director supiera que era responsable de la muerte de Gullvieg, pero eso era ridГ­culo. No estarГ­a vivo si alguien hubiera descubierto lo que habГ­a hecho.

—"Los primeros años llegarán mañana después de que sean recogidos. Espero que se comporten bien y les den la bienvenida a nuestra institución". Con eso Gaius tomó su asiento y comenzó a ordenar su comida.

—"Supongo que eso es todo", bromeó Daine. "Me alegro de verlos de nuevo. ¿Qué tal el descanso?"

Ryker pidiГі cordero con verduras mientras Brokk y Sol se ponГ­an al dГ­a con Daine. Maurelle se quedГі callada y Г©l entendiГі por quГ©. HabГ­a estado inmersa en la pena durante semanas con su familia.

Cuando llegГі la comida, Ryker vio el familiar resplandor verde y quiso gruГ±ir. Esperaba que matando a Gullvieg se eliminara este aspecto de la vida en la academia, pero persistiГі como un hongo en los edificios. Solo podГ­a rezar para que fuera mГЎs fГЎcil deshacerse de Г©l cuando llegara el momento.

Mientras Г©l y sus amigos comГ­an la comida, se necesitГі un gran esfuerzo para suavizar sus expresiones mientras la comida continuaba. Cuando la frente de Maurelle permaneciГі pellizcada durante varios segundos, casi se arrepintiГі de que el vГ­nculo con Г©l le proporcionГі a ella y a sus amigos inmunidad a la influencia de la pociГіn.

Por el rabillo del ojo notГі a Gaius observando a su grupo. La advertencia se filtrГі a travГ©s de sus nervios y lo hizo moverse en su asiento. Necesitaba conseguir informaciГіn sobre este macho, asГ­ que entendiГі con quГ© estaba tratando. El conocimiento era su mejor amigo en este momento, y demasiado difГ­cil de conseguir.

Volviendo a la conversaciГіn, decidiГі salir a hurtadillas esa noche y preguntarle a su tГ­a o a la Peridun. Cuanto antes se enterara de lo de Gaius, mejor.




CapГ­tulo Tres


—"No puedo creer que esta sea la misma academia", observó Maurelle mientras tomaba las clases de la liga aérea en las que había pasado tanto tiempo el año pasado.

Ya no habГ­a ventanas ni obstrucciones. Cuando llegaron el aГ±o pasado, las ventanas estaban bloqueadas por paneles de madera o persianas sobre el vidrio, cortando no solo el sol, sino tambiГ©n el aire. Ahora, el vidrio y otros artГ­culos se habГ­an ido, permitiendo que el aire fluya libremente a travГ©s del edificio. Esto energizГі a Maurelle y le dio sus habilidades elementales de aire de una manera que nunca habГ­a experimentado el aГ±o pasado en la academia.

ParecГ­a que los cambios afectaban a todos los estudiantes mientras el viento barrГ­a la habitaciГіn, enviando papeles y sillas a un vГіrtice antes de que el profesor agitara su mano y lo cortara antes de que la mierda se saliera de control.

Una de las muchas cosas que le molestaron el aГ±o pasado fue cГіmo esperaban enseГ±arles a manejar y controlar sus elementos cuando sofocaban dicho elemento durante las lecciones. Sentir la diferencia le dio la esperanza de que su nuevo director, Gaius, era diferente.

Claro, seguГ­a envenenando la comida con una pociГіn que hacГ­a a los estudiantes maleables a las influencias externas, pero quizГЎs no era consciente de la prГЎctica. Un resoplido saliГі de su boca. Si realmente creГ­a eso, entonces no era tan inmune a las influencias como la Peridun le dijo.

Era impensable que un nuevo director pudiera hacerse cargo y no descubriera todas las parcelas de la escuela que dirigГ­an. AdemГЎs, el consejo nunca reemplazarГ­a a la malvada Gullvieg con alguien menos leal. Necesitaban a los graduados bajo su pulgar o su control sobre los Fae se astillarГ­a y tendrГ­an una gran revuelta en sus manos.

Dani entrГі en la habitaciГіn con su sГ©quito a remolque, rompiendo la emociГіn que fluГ­a por Maurelle al pensar en poder explorar realmente sus elementos. La vil hembra pensГі que su mierda no apestaba.

Claro, Danielle era hermosa, pero Ryker no querГ­a tener nada que ver con ella. Nunca le habГ­a dado a Dani mГЎs que una mirada pasajera. En cambio, querГ­a a Maurelle, lo que aГєn la aturdГ­a. No era nada especial. VenГ­a de una familia pobre y era mГЎs curiosa que las otras mujeres de su edad.

Cuando pensГі en cГіmo reaccionarГ­a Dani si supiera que Ryker era en realidad el Rey de los Faes, la mocosa perra perderГ­a la cabeza. Una risita dejГі los labios de Maurelle antes de que pudiera detenerla. Una razГіn mГЎs por la que Maurelle estaba ansiosa por el dГ­a en que Ryker le dijera a Mag Mell quiГ©n era realmente.

—"Oh, mira", se burló Dani. "Han dejado entrar a la chusma este año. No debería sorprenderme. No todos estamos programados para el consejo. Hay más puestos para cocineros y criadas que para cualquier otra cosa".

Ashlee se riГі en respuesta como lo hicieron otras cuatro mujeres de su grupo. Maurelle puso los ojos en blanco y les dio la espalda para mirar por la ventana abierta. El chillido que Dani dejГі salir fue mГєsica para sus oГ­dos. Maurelle quiso sonreГ­r a la perra cuando el viento que enviГі a travГ©s de la habitaciГіn le arrancГі el pelo y le rompiГі una manga de la blusa que llevaba puesta.

Maurelle entendiГі la ira y la frustraciГіn. Le estaba mostrando a Dani que no era vista como una amenaza. Y no lo era. DespuГ©s de todo lo que habГ­a pasado el aГ±o pasado, no habГ­a nada que Dani pudiera hacer que no pudiera manejar.

—"Veo que tu personalidad sigue brillando, Braveheart", bromeó Ryker.

Maurelle se apartГі de la ventana y una sonrisa floreciГі en su rostro. QuerГ­a correr y saltar a sus brazos y luego darle besos por toda la cara. Era difГ­cil contener lo que ella sentГ­a por Г©l.

Г‰l la confundiГі la mayorГ­a de los dГ­as, pero eso no disminuyГі lo mucho que ella lo querГ­a. Claro, ella inicialmente se alejГі de Г©l cuando Г©l levantГі paredes que pusieron espacio entre ellas. Pero cuando ella notГі que Г©l actuaba distante para protegerla a ella en vez de a sГ­ mismo, sus defensas contra Г©l se desvanecieron.

Era obvio que inicialmente estaba protegiendo su propio trasero de la directora, pero eso cambiГі despuГ©s de que casi muriera en los juicios del aГ±o pasado. No es que lo entendiera del todo hasta que descubriГі que era el rey Fae.

—"Mis habilidades se comparan con las tuyas, pero no me faltan del todo", bromeó.

Brokk envolviГі a Maurelle en un abrazo y le dio un beso en la comisura de sus labios. MirГі por encima del hombro a Ryker y notГі que el surco de su frente estaba ahГ­ y se fue tan rГЎpido que se preguntГі si se lo imaginaba. Ahora, parecГ­a como si estuviera feliz de que su amigo estuviera reteniendo a su mujer mГЎs tiempo del que ella deberГ­a.

—"Tomastes habilidades locas, Elle", dijo Brokk mientras la dejaba ir y daba un paso atrás. Su mirada calurosa la recorrió de pies a cabeza, prendiendo fuego a su sangre. No debería sentirse tan atraída por él, pero no podía negar que el macho sexy la atraía.

—"¿Puedes creer que nos dejen practicar con las ventanas abiertas?" Preguntó, cambiando de tema.

—"Así es como debería ser", gruñó Ryker, enviando viento a través de las ventanas abiertas. Los estudiantes miraban a su alrededor con expresiones de recelo mientras la profesora Aobheal entrecerraba los ojos a su grupo.

Inmediatamente, Maurelle agarrГі a Brokk y Ryker mientras decГ­a: "Parece que no deberГ­a haberme emocionado tanto". Parece que no puedo detener el tornado que se arremolina en mi pecho".

Sacudiendo la cabeza, Ryker se concentrГі en ella y Brokk le apretГі la mano a cambio. "SГ© lo que quieres decir. Creo que mis elementos estГЎn jugando con los tuyos, Elle. No puede evitar que se sienta inexplicablemente atraГ­do por tu poder". El guiГ±o que le disparГі hizo que sus mejillas se pusieran al rojo vivo.

Su distracciГіn funcionГі cuando los vientos se calmaron y Ryker forzГі una risa de su garganta. El profesor le pasГі las manos por la camisa y le tirГі del dobladillo para enderezar la tela.

—"Espero que todos ustedes mantengan sus escudos en mi clase. Estaremos sobrepasando sus límites y añadiendo habilidades avanzadas este año, pero aún no han llegado a ese punto", anunció Aobheal mientras caminaba por las piedras. "Comenzaremos este año tratando de enhebrar la proverbial aguja".

Con un movimiento de su mano, dos platos con agujas de coser e hilo flotaron desde una mesa puesta a un lado de la habitaciГіn hasta el centro de la misma y se quedaron allГ­ esperando a los estudiantes. Maurelle cogiГі un juego de instrumentos y se preparГі para hacer la tarea.

—"Romper una corta sección de hilo para usar en este ejercicio", continuó el profesor.

Ryker sostuvo ambas piezas y las soltГі. Un jadeo resonГі detrГЎs de Maurelle cuando se quedaron flotando en el mismo lugar. Como si su concentraciГіn fallara, cayeron al suelo.

Girando la cabeza, Maurelle vio a Dani y Ashlee abriendo la boca a Ryker antes de que sus expresiones se volvieran codiciosas. Poniendo un poco mГЎs de movimiento en sus caderas, Dani se acercГі. "Eres tan poderoso, Ryker. ВїPuedes darme consejos?"

—"No", dijo Ryker simplemente y se volvió hacia Maurelle, que se esforzó por ocultar la sensación de satisfacción que recorría a través de ella.

—"No hay duda de que fue una casualidad", desafió Maurelle. "Veamos cómo los levantas del suelo".

—"¿Tratando de sacarme de quicio, Maurelle?" Preguntó con una voz un poco ronca.

Inclinando la cabeza hacia un lado, le enviГі una sonrisa y tratГі de hacerlos flotar en su palma abierta. La aguja se levantГі ligeramente, pero el hilo no se moviГі. Brokk maldijo a su lado y se rompiГі el cuello de lado a lado.

Manteniendo su atenciГіn en Ryker, vio como Г©l levantaba los implementos del suelo sin problemas y luego los arrojaba con un ligero tambaleo al elevarse unos centГ­metros por encima del suelo. Un segundo despuГ©s volvieron a caer al suelo. El surco entre sus cejas le dijo que estaba tratando de hacerlo parecer difГ­cil.

Maurelle permaneciГі concentrada en su propia tarea. DespuГ©s de todo, necesitaba toda la ayuda posible. No era tan poderosa como Ryker, pero querГ­a serlo. Necesitaba serlo si esperaba tener una oportunidad en el infierno de aparearse con el rey de los Fae.

Su mirada se dirigiГі a Brokk y notГі la misma mirada decidida en su cara. SabГ­a que Г©l y los otros querГ­an probar a Ryker que tenГ­a razГіn al nombrarlos como su guardia.

—"Concéntrate en un elemento a la vez", instruyó el profesor. "Una vez que tengas a ese en posición, todo lo que tienes que hacer es mantenerlo firme. Entonces puedes cambiar al otro para cumplir la tarea".

Teniendo esto en cuenta, Maurelle decidiГі levantar primero la aguja y mantenerla en su lugar mientras manipulaba el hilo con su elemento de aire. Una rГЎpida exploraciГіn de la habitaciГіn le dijo que ninguno de la clase estaba terriblemente cerca de cumplir la tarea.

Eso reforzГі su determinaciГіn. Buena o mala. Era muy competitiva y querГ­a ser la mejor en lo que hacГ­a. Su estГіmago se acalambrГі cuando pasaron los segundos sin que pudiera mantener la aguja quieta.

Ryker dio un paso mГЎs cerca de ella y tambiГ©n lo hizo Brokk. La proximidad de ellos le calmГі el intestino y centrГі su atenciГіn. Con el calor y el olor que la rodeaban, logrГі estabilizar el metal afilado. El impulso de enviarlo volando a la cara de Dani casi le robГі la atenciГіn.

Saber que Ryker estaba a su lado, dГЎndole el apoyo que necesitaba le hizo olvidar a la odiosa hembra y deslizar el hilo por el extremo abierto. Ella gritГі y aplaudiГі, luego lo tomГі en su mano y lo sostuvo para Brokk y Ryker.

—"Bien hecho, Srta. Longstrom", gritó Aobheal. "Ahora que el resto de ustedes sigan el ejemplo."

El pecho de Maurelle se hinchГі con orgullo, pero antes de nada se dijo que Gaius entrГі en la habitaciГіn, seguido de un grupo de lo que Maurelle asumiГі que eran profesores. La Гєnica razГіn por la que pensГі eso fue porque Pravus, un profesor que enseГ±aba historia Fae estaba entre el grupo. ВїQuГ© otros cambios habГ­a implementado el nuevo director cuando se hizo cargo?






Ryker se obligГі a mantener sus manos relajadas a los lados. Apretar los puГ±os y gruГ±ir sГіlo alertarГ­a al personal de que habГ­a algo raro en Г©l. No podГ­a permitirse mГЎs escrutinio del que ya estaba enfocado en Г©l.

—"¿A qué debemos este placer, Gaius?" Aobheal le preguntó al director. Ryker reconoció a su profesor de historia junto con un profesor de bomberos. El frío se deslizó por su columna vertebral como advertencia. El talismán de su bolsillo se calentó contra su pierna.

—"Estamos aquí para recoger a Ryker Isladore", respondió el director, y luego dirigió sus brillantes ojos azules a Ryker. La mirada parecía atravesar su pecho y ver todos los secretos que escondía.

Necesitando ocultar su terror, Ryker le dio a Maurelle su aguja e hilo y se tomГі un momento para ponerse en tierra en su presencia antes de enfrentarse a lo que le esperaba. Con los nervios mГЎs firmes, Ryker sonriГі y dio un paso adelante.

—"¿En qué puedo ayudarle?" preguntó mientras el director se giraba y salía del aula.

Echando otro vistazo a Maurelle, Ryker vio el miedo grabado en su hermoso rostro. Con un ligero movimiento de cabeza, esperaba enviarle el mensaje de que no se involucrara. Vio la batalla en sus ojos. O, quizГЎs el vГ­nculo que compartГ­a con ella le dijo que ella estaba debatiendo ir con Г©l para poder ayudar.

Una vez que estuvieron afuera, Gaius hizo una pausa y seГ±alГі el patio abierto con una mano. "Me gustarГ­a hacer otra evaluaciГіn de sus elementos".

—"Oh", respondió Ryker. "¿Hay algún problema?" Por dentro estaba maldiciendo y entrando en pánico. El viento se levantó en reacción y las nubes de tormenta se reunieron sobre sus cabezas. Tomó un respiro para calmarse antes de que le cayera un rayo o se iniciara un incendio debido a sus emociones. Ahora no era el momento de perder su mierda.

Gaius no se molestГі en mirarlo mientras continuaba hacia la gran extensiГіn de hierba. "No hay problema, pero la anterior directora dejГі varias preguntas sin respuesta que he pasado las Гєltimas semanas tratando de entender".

—"¿Y yo soy uno de ellos?" preguntó Ryker mientras se detenía cuando Gaius lo hizo cerca del medio del césped. Le costó todo su esfuerzo poner una expresión inocente en su cara y evitar que se le vieran los nervios. "Yo no era consciente de que yo había roto una de las reglas".

Gaius agitГі una mano en el aire y sacudiГі su cabeza. "No es que hayas roto una regla. GuardГі notas sobre la apariencia de tus poderes elementales. Parece que eres algo novedoso en la academia. Bueno, todo de Mag Mell si soy honesto. No hemos visto a nadie con una habilidad confirmada para manejar tres elementos, posiblemente cuatro", respondiГі el director y se detuvo mientras miraba directamente a los ojos de Ryker.

Permanecieron asГ­ durante tanto tiempo, que Ryker estaba listo para disparar al director y a otros profesores con rayos y hacer su escape. Antes de entrar en acciГіn, Gaius rompiГі la mirada silenciosa. "Ya que el Rey estaba vivo. Es solo su lГ­nea la que tiene esa habilidad, pero tГє no eres de su lГ­nea, Вїverdad?"

—"Ojalá", dijo Ryker con un resoplido. "No tengo ni idea de lo que escribió Gullvieg, pero solo tengo una conexión con dos. Tal vez una tercera, pero eso es probablemente una casualidad y no algo en lo que pueda confiar".

—"Bien. Ya veremos, ¿no? Dijo Gaius mientras hacía un gesto a los maestros que inmediatamente se extendieron alrededor de Ryker. "Ya sabes que hacer".

Asintiendo con la cabeza, Ryker frunciГі la boca y preguntГі: "ВїPero por quГ© estamos haciendo esto aquГ­? La Гєltima vez que me evaluaron fue en el gimnasio".

La nariz del director se arrugГі cuando entrecerrГі los ojos. "No tengo idea de por quГ© se realizГі una evaluaciГіn de los poderes elementales donde son sofocados hasta un grado en que es casi imposible acceder a cualquier conexiГіn. Cuando asistГ­ a la academia fue donde todos los estudiantes descubrieron sus elementos, como debe ser".

Un profesor hizo un ruido, atrayendo la mirada de Ryker. No tenГ­a ni idea de lo que la hembra enseГ±aba, pero la mirada que lanzГі a Gaius dijo que no estaba contenta de que difamara las prГЎcticas de Gullvieg.

Ryker hizo una nota para no cruzarse en su camino en el futuro. Cualquiera que estuviera del lado de esa vil perra no era amigo suyo. Los otros mantuvieron una expresiГіn neutral y esperaron instrucciones de Gaius.

—"Comencemos", ordenó Gaius mientras inmovilizaba a ese profesor con una fuerte mirada. Manteniendo una postura relajada, Ryker no cubrió sus conexiones tanto como debería.

Fue golpeado por una rГЎfaga de viento seguida de una ola de agua. Inmediatamente sus elementos respondieron y redirigieron el viento. Al darse cuenta de lo que pasГі, dejГі que su mente dejara caer el agua y se empapГі de la ola, pero no antes de que se detuviera en el aire.

Antes de que Ryker pudiera recuperar la cordura, fue envuelto por el calor y el fuego surgiГі a su alrededor. Al segundo siguiente, la tierra comenzГі a moverse a su alrededor. Se mantuvo firme en su conexiГіn con el elemento tierra. El poder empujГі su agarre, desviando parte de su energГ­a y haciendo que su impacto sobre el fuego vacilara.

Ryker jadeaba con el sudor que le caГ­a por las sienes mientras apenas mantenГ­a a raya las llamas. Pasaron a hurtadillas y le chamuscaron las alas, el pelo y los dedos como corresponde a alguien con una conexiГіn mГ­nima con el elemento. TropezГі y cayГі al suelo un segundo despuГ©s. En el momento en que su mano tocГі el suelo, sintiГі que su conexiГіn se disparaba.

Aterrorizado de mostrar que estaba conectado a los cuatro, Ryker dejГі de controlar el fuego y dedicГі toda su energГ­a a sofocar su conexiГіn con la tierra.

Las llamas salieron inmediatamente y lo cubrieron. La agonГ­a ardiente atravesГі su cuerpo mientras se derrumbaba en el suelo.

El fuego se desvaneciГі en el siguiente instante y Gaius estaba de pie sobre Г©l en el siguiente suspiro. "Trae al curandero. Necesita atenciГіn mГ©dica inmediata". Gaius agitГі una mano y una brisa fresca se moviГі sobre su piel quemada.

—"No sé en qué estaba pensando esa mujer. No tienes control sobre todos los elementos. Apenas tienes tres. Y, incluso eso es empujarlo".

Tatiana, la enfermera apareciГі a su lado y tenГ­a una pociГіn en su mano. "ВїEstГЎs jugando con fuego otra vez, Ryker?" se burlГі mientras levantaba su cabeza y vertГ­a el lГ­quido en su garganta.

—"No puedo resistirme", se burló mientras rezaba para que la poción le quitara el dolor. En segundos hizo su trabajo y pudo ponerse de pie.

—"Cuidado", advirtió la enfermera, "las heridas no están completamente curadas".

—"Estaré bien. Gracias", le dijo y luego se dirigió al director.

—"Entonces, ¿tengo tres elementos?" preguntó con más entusiasmo de lo que sentía. Lo ocultaría incluso si pudiera, pero cualquiera estaría encantado de saber que tiene tanto poder y que es mejor para él interpretar el papel.

Agitando su cabeza, Gaius suspirГі. "SГ­, pero aГєn no se ha visto cuГЎnto control real tendrГЎs".

—"¿Crees que será suficiente para convertirse en un policía?" postuló Ryker mientras cepillaba con cuidado la ceniza de sus ropas andrajosas. Cualquier varón que pudiera manejar tres elementos sería destinado a su fuerza policial, así que una vez más, Ryker jugó el papel que debía.

Mientras se detenГ­a y consideraba eso, se dio cuenta de que si no habГ­a descubierto su verdadera identidad, estarГ­a feliz de convertirse en un policГ­a. GanarГ­a mГЎs dinero y podrГ­a permitirse mejores condiciones de vida para Г©l y su madre. La locura de cГіmo la vida habГ­a dado un giro brusco a la izquierda y habГ­a volcado todo su mundo.

—"Si puedes ganar suficiente control sobre los otros elementos, eso es posible, pero requerirá un trabajo significativo de tu parte", le informó el director.

Esa era la oportunidad perfecta para pedir entrenamiento adicional. Ryker lo necesitaba desesperadamente. No podГ­a cubrir todos los elementos, pero tenГ­a que encontrar a alguien mГЎs o algunos libros para aprender sobre la Tierra. "Estoy dispuesto a hacer el trabajo, seГ±or. ВїCree que puedo tomar clases de agua y fuego? Quiero hacerlo mejor por mi madre y proporcionarle una vida mejor", le dijo al macho honestamente.

—"No veo por qué no", respondió el director antes de atravesar el césped. Antes de llegar demasiado lejos, miró hacia atrás y gritó: "Tendré un horario revisado para ti por la mañana".

—"Gracias, señor", dijo Ryker y luego corrió a los dormitorios para cambiar tan rápido como su cuerpo dolorido lo permitiera. Rezando una silenciosa oración a los Dioses, Ryker esperaba que fuera el único drama que encontrara este año escolar.




CapГ­tulo Cuatro


—"¿Qué demonios te ha pasado? ¿Tus encantos te fallaron esta vez?" Maurelle se burló incómodamente cuando Ryker abrió la puerta de su suite en los dormitorios. Notó la solemne expresión de Brokk sobre su hombro, con Daine y Sol listos para matar desde su posición en el sofá. Ryker estaba rodeado de machos leales que le protegerían con sus vidas.

—"Fue la nueva evaluación que Gaius me hizo pasar", transmitió Ryker con un gruñido antes de lanzar un hechizo de amortajamiento a la habitación. "Tuve que forzar a mis elementos, así que no los revelé todos. Esta vez me lanzó más de uno a la vez".

—"¿Crees que lo sabe?" preguntó Maurelle mientras le envolvía los brazos alrededor de la cintura. Había sido un largo descanso sin verlo. Ella extrañaba todo de él. El nudo apretado en su estómago se desplegó mientras su olor masculino y su calor la rodeaban.

—"No. Él no tiene ni idea. Pero las cosas tienen que cambiar para que pueda protegeros a todos", anunció Ryker mientras sus manos se apretaban contra su espalda.

Dando un paso atrГЎs, Maurelle inclinГі la cabeza y observГі la expresiГіn de Ryker. "ВїQuГ© tiene que cambiar?" Odiaba el temblor que se le metiГі en la voz cuando hizo esa pregunta. DespuГ©s de tantas semanas de separaciГіn, le preocupaba que Г©l perdiera interГ©s en ella. Le atravesГі el corazГіn sabiendo que estaba a punto de terminar con ella.

Ryker extendiГі la mano y acunГі su mejilla. "Necesito asegurarme de que estГЎs a salvo, Braveheart".

Las lГЎgrimas se nublaron en sus ojos y la emociГіn quemГі la parte de atrГЎs de su garganta, sin embargo, ella retuvo las lГЎgrimas negГЎndose a dejar que Г©l viera cuГЎnto le dolГ­a. Brokk estaba detrГЎs de ella en el siguiente segundo con sus manos sobre sus hombros.

—"No tienes que terminar las cosas con Maurelle. Podemos mantenerte a salvo", le prometió a Ryker. Por el rabillo del ojo vio a Sol y Daine asintiendo con la cabeza.

—"Sé que lo harás", le dijo Ryker a su amigo con una sonrisa. "Pero no voy a romper con Maurelle. Es mía, aunque no pueda reclamarla ahora. Quiero que ustedes tres sean mi Guardia del Rey".

Brokk apretГі su agarre y luego se acercГі a su espalda en el mismo momento en que el alivio pasГі por la mente de Maurelle. El calor de Brokk disminuyГі repentinamente y ella se dio cuenta de que Ryker estaba mirando lo cerca que estaban el uno del otro. Un rubor se deslizГі por sus mejillas. Se habГ­a sentido reconfortada por su presencia, necesitando su silencioso consuelo.

—"Está bien", admitió Ryker mientras miraba entre los dos y luego miró a Daine y a Sol. "Somos una unidad. Todos nosotros".

Las palabras del rey colgaban en la habitaciГіn antes de que Brokk aclarara su garganta y rompiera el silencio. "ВїHay alguna ceremonia para hacernos tu guardia?"

Ryker cerrГі el hueco entre Г©l y Maurelle y luego la agarrГі de la mano. Todo su cuerpo se estremeciГі por tener a Brokk a su espalda y a Ryker al frente. La dinГЎmica habГ­a cambiado hace un momento, pero ella no tenГ­a ni idea de cГіmo o quГ© significaba todo esto. Lo mГЎs importante en este momento era asegurarse de que la identidad de Ryker permaneciera enmascarada hasta que estuviera en condiciones de hacerse cargo del reino.

—"Honestamente, no tengo ni idea de lo que estoy haciendo", dijo Ryker y luego levantó la mano y la colocó sobre la de Brokk donde descansaba en su hombro. Maurelle tembló al quedar atrapada entre dos machos sexys. Claro, ella se sentía más atraída por Ryker, pero no podía negar su atracción hacia Brokk también.

—"Te otorgo el privilegio de ser el primer miembro de mi guardia, Brokk Westhaven", dijo Ryker. El aliento de Brokk se le atascó en la garganta y sus dedos se agarraron a la carne de Maurelle. Con un gesto de dolor, giró la cabeza y vio cómo Brokk apretaba los dientes y mantenía la mirada de Ryker.

Sol y Daine saltaron del sofГЎ y se colocaron a su lado izquierdo. Alargando los brazos, buscГі la mano de Ryker mientras el agarre de Brokk se convertГ­a en un moretГіn. Tan pronto como su carne se juntГі, la tensiГіn dejГі las manos de Brokk.

Un segundo despuГ©s, tirГі del cuello de su camisa hacia abajo para revelar un escudo. HabГ­a una criatura alada, un cuchillo y una runa dentro del tatuaje de color rojo que habГ­a aparecido. "Whoa". Eso es jodidamente malvado", Brokk sonriГі. Un segundo despuГ©s, rodeГі a Maurelle con sus brazos y la hizo girar.

—“Vale, el grandullón me ha bajado", se rió. "La marca es hermosa pero parece que será peligrosa”.

—"De acuerdo", añadió Ryker. "Tendremos que ir a ver a la Peridun y preguntarle si puede ocultar esto también. Primero, asumiendo que ustedes dos estén de acuerdo, déjenme terminar esta ceremonia".

Este fue su primer acto como Rey, pensГі Maurelle. Sus hombros retrocedieron, y una sonrisa se abriГі en su boca cuando Daine y Sol estuvieron de acuerdo. No tenГ­a ni idea de cГіmo su vida la habГ­a llevado a este punto, pero estaba agradecida a los Dioses por hacerla parte de ello.

—"Yo te concedo el privilegio de ser el segundo miembro de mi guardia, Daine Norse", recitó Ryker como lo había hecho con Brokk. El rostro de Daine se tensó por la incomodidad y se dobló por la mitad, poniendo las manos sobre las rodillas.

Maurelle pasГі la palma de su mano sobre su espalda ofreciendo todo el confort que pudo. Le llevГі varios segundos a Daine levantar la cabeza y ponerse de pie. Le sonriГі y le levantГі el dobladillo de su camisa. El mismo diseГ±o apareciГі en rojo en su pecho.

—"¿Estás listo?", le preguntó Ryker a Sol.

—"Como nunca lo estaré".

Antes de que el Rey empezara a hablar, Maurelle notГі las manos de Sol apretadas en puГ±os a sus lados. Maurelle mantuvo su mano en la espalda de Daine mientras veГ­a a Ryker continuar. "Te concedo el privilegio de ser el tercer miembro de mi guardia, Sol Aliante."

Sol debe haber sido preparado para el dolor, ya que aparte de un mГєsculo que hacГ­a tictac en su mandГ­bula no habГ­a ningГєn signo externo de que el proceso hubiera causado algГєn dolor. No fue necesario que se quitara la camisa para confirmar que habГ­a recibido la marca. Llevaba una camiseta blanca y el tatuaje se veГ­a fГЎcilmente.

—"¿Cómo llegamos a esta Peridun?" preguntó Brokk mientras se frotaba las manos. Maurelle tenía claro que el macho estaba extasiado.

Ryker estaba radiante y el peso sobre sus hombros parecГ­a mГЎs ligero de alguna manera. "Las alcantarillas serГЎn la forma mГЎs segura de llegar allГ­. Gaius ha aumentado las patrullas y casi me atrapГі la otra noche cuando tratГ© de escabullirme".

—"Oh, yay. Los tubos de mierda!" vitoreó Maurelle. "Quizás tu encanto nos saque a todos ilesos hoy". De ninguna manera quería que se repitiera lo de casi morir en esos sucios pasillos. Ser la cena de los vampiros una vez fue suficiente para toda la vida.






El corazГіn de Ryker latГ­a tan fuerte contra su caja torГЎcica que era una maravilla que no se liberara y volara. El frГ­o aire nocturno lo envolviГі, llamando a su nГєcleo elemental. Desde su segunda evaluaciГіn ese dГ­a, luchГі por mantener sus elementos ocultos. HabГ­a una razГіn por la que la academia era mГЎs segura para los Fae de su edad.

Cuando llegaron a sus poderes era imposible mantener la mierda en secreto. Cualquier indicio de los elementos y sus cuerpos reaccionaban automГЎticamente. Por supuesto, eso era mГЎs peligroso con el fuego y el agua, pero el aire y la tierra podГ­an ser igual de peligrosos. Se necesitaban muchas horas de entrenamiento para poder afinar su control y ser capaces de formar y manejar los elementos de manera efectiva.

A Ryker le habГ­a ido tan bien hasta antes, cuando todos habГ­an sido arrojados contra Г©l. De alguna manera se metiГі con su manto real y ahora tenГ­a que luchar contra cada uno de sus elementos en un momento dado. En ese momento, Ryker reaccionГі como si Gaius hubiera lanzado un desafГ­o.

Sol se echГі atrГЎs y les dio el visto bueno, indicando que el camino al edificio de las varas estaba despejado. Ryker hizo una nota mental para determinar si habГ­a otras entradas en el campus. Estaban corriendo un gran riesgo al colarse en el sГіtano de ese edificio.

Manteniendo sus alas bajas en la espalda, Ryker corriГі por el cГ©sped mientras se pegaba a las paredes de piedra. Todos se congelaron cuando una rama se rompiГі detrГЎs de ellos. Girando solo la cabeza, Ryker escudriГ±Гі el ГЎrea.

ObservГі el rostro pГЎlido de Maurelle y se encontrГі con su mirada. Ella gritГі "Lo siento". SonriГі y se centrГі en el ГЎrea que les rodeaba. El ruido no era suficiente para alcanzar a los profesores que dormГ­an al otro lado de los muros de piedra, pero algunos eran conocidos por poner alarmas en el viento.

Varios segundos despuГ©s, cuando nadie corrГ­a hacia ellos, reanudaron su camino hacia el interior. Ryker maldijo en voz baja cuando encontraron la puerta cerrada. Justo cuando abriГі la boca para lanzar un hechizo para abrir las cosas, hubo un traqueteo en el otro lado. Ryker arrebatГі a Maurelle y las manos de Sol y luego asintiГі con la cabeza a Daine y Brokk. Sabiendo lo que iba a hacer, Brokk agarrГі a Daine y luego alcanzГі a Maurelle.

Los cinco desaparecieron en el aire en el momento en que el panel de madera se abriГі. Uno de los agentes del orden que habГ­a visto en el campus saliГі del edificio y buscaba intrusos en la zona. Parece que no deberГ­a haber asumido que nadie oyГі el crujido del palo.

Ryker contuvo la respiraciГіn y se lanzГі hacia adelante cuando los ojos del guardia viajaron sobre el lugar donde estaban. Necesitaban entrar antes de que la puerta se cerrara. MetiГі a Sol dentro y lo siguiГі de cerca.

Brokk debiГі llamarle al viento porque crujiГі entre los ГЎrboles un segundo despuГ©s y cubriГі el ligero ruido de sus pasos. Maurelle estaba dentro antes de que el panel comenzara a cerrarse. Daine y Brokk se abrieron paso antes de que los atraparan afuera.

Ryker se apresurГі a la puerta del sГіtano sin molestarse en romper su conexiГіn o liberar su invisibilidad. Su guardia escaneГі el ГЎrea mientras se movГ­an. Sol se acercГі y susurrГі: "La costa estГЎ despejada. Bajemos esas escaleras ahora".

Asintiendo con la cabeza, Ryker siguiГі al macho por la puerta de al lado y bajГі al sГіtano. En el momento en que la puerta se cerrГі, se vieron envueltos en la oscuridad. Las antorchas estaban apagadas, no dejando una forma fГЎcil de navegar.

Maurelle se aferrГі a su brazo por un lado y Brokk por el otro. Su cuerpo temblГі entre ellos. Sin duda le aterrorizaban las alcantarillas. La Гєltima vez que estuvo allГ­ casi se muere.

El negro intenso no se rompiГі cuando llegaron al fondo. Ryker soltГі a Sol para poder llamar a sus llamas a la palma de su mano. Sol debiГі tener la misma idea porque Г©l hizo lo mismo. Brokk trajo una de las antorchas de la pared y Ryker la encendiГі. Iban a necesitarla en el lugar al que iban.

—"Mantén los ojos abiertos. Al menos dos vampiros tienen un gusto por Maurelle", advirtió Ryker antes de dirigirse a The Edge.

—"No tienes más novias aquí abajo, ¿verdad? Si es así, espero que a éstas les gustes más que a la última", dijo Maurelle. Ella le soltó el brazo finalmente y él perdió la conexión con ella. Ella lo calmó y lo centró, incluso cuando estaban en peligro de ser descubiertos rompiendo las reglas.

Una risa burbujeГі en su garganta. Esta hembra lo hacГ­a sonreГ­r y reГ­r en casi todas las situaciones. Muy pocos Fae tenГ­an ya razones para sonreГ­r y ser verdaderamente felices, asГ­ que Г©l disfrutaba de la frivolidad que ella traГ­a a su vida.

—"Necesito tomar lecciones de ti, Ryk. No tengo ningún juego con las hembras", respondió Brokk riéndose.

—"Tienes mucho juego", corrigió Maurelle. "Puede que no seas el rey, pero eres sexy a pesar de todo".

—"Maldición. Eso me alegró el día. Parece que soy la competencia, Brokk se burló.

—"¿Por qué tienes que ser la competencia?" respondió Ryker. Su grupo cayó en silencio durante varios latidos antes de que Maurelle se aclarara la garganta.

—"No puedo creer que Nyx tuviera razón sobre la realeza. Nunca lo olvidaré", dijo Maurelle.

—"Quiero participar en esto..." La respuesta de Daine fue cortada cuando un escurridizo paso sonó delante de su grupo. Todavía estaban caminando en fila india por el túnel, pero Ryker sabía que había una abertura adelante. No era la misma en la que Maurelle fue atacada la última vez, así que no se sabía qué tipo de criatura podrían encontrar.

Ryker le pasГі la antorcha a Maurelle y saludГі a Brokk delante de ella. La querГ­a en medio de su pequeГ±o grupo. A los vampiros les aterrorizaba el fuego, asГ­ que ella tendrГ­a algo de protecciГіn.

Sin querer advertir a los que esperaban en la sala unos metros delante de ellos, Ryker saliГі corriendo, manteniendo sus pasos lo mГЎs silenciosos posible con sus habilidades elementales. Su guardia no estaba tan silenciosa cuando salieron a correr detrГЎs de Г©l.

Ryker enviГі una ola de agua delante de su grupo y se decepcionГі al ver a tres vampiros y un demonio de pie cuando salieron del estrecho canal. Con un destello de colmillos, uno de los chupasangres lo atacГі.

Ryker sacГі el puГ±o y golpeГі la mejilla del vampiro. La cabeza se le partiГі, pero eso no lo disuadiГі mucho ya que se lanzГі al aire y aterrizГі sobre Ryker. La pareja cayГі al suelo y los puГ±os golpearon su cara rГЎpida y furiosamente.

El sonido de la lucha resonГі a su alrededor. Ryker pudo concentrarse en su enemigo porque solo habГ­a cuatro enemigos que Г©l y su guardia podГ­an manejar fГЎcilmente, dejando a Maurelle a salvo.

Los colmillos se alojaron en uno de sus hombros enviando dolor por todo su costado. El vampiro le mordiГі tan fuerte que debiГі de haber golpeado un nervio. Ryker maldijo e intentГі quitarle el chupasangre, pero uno de sus brazos se negГі a cooperar.

Agarrando un puГ±o lleno de pelo, Ryker le arrancГі la cabeza a la sanguijuela y la tirГі hacia atrГЎs. Los colmillos le atravesaron la carne, pero el dolor no era tan fuerte como antes. GruГ±endo, pateГі y enviГі al vampiro volando por la habitaciГіn.

El grito de Maurelle rasgГі el aire un segundo despuГ©s, atrayendo toda su atenciГіn. Dos vampiros mГЎs se dirigГ­an hacia ella con sus colmillos desnudos. Ella agitГі la antorcha en sus caras y retrocediГі hasta que golpeГі la pared de la cueva. HabГ­a aprendido una lecciГіn de la Гєltima vez. Nunca dejes tu espalda expuesta.

Un hombro se clavГі en el costado de Ryker, pero se las arreglГі para agarrarse antes de caer. Llamando a su fuego a sus manos, las puso en la primera camisa del chupasangre. Cuando la tela no se incendiГі inmediatamente, maldijo y le dio una patada en la rodilla.

Con el vampiro en el suelo, Ryker le pisoteГі la cabeza hasta que vio materia cerebral. Sin pensar mГЎs en el enemigo, se apresurГі a ir a Maurelle. TirГі a una vampiresa y pateГі al macho de la pareja y luego se puso en posiciГіn frente a su hembra.

Los chupasangres volvieron a atacarlos. Maurelle se parГі junto a Г©l y llamГі a su elemento aГ©reo. Con un movimiento de su mano, obligГі al vampiro macho a luchar contra los fuertes vientos. Maurelle empujГі la antorcha hacia el macho, pero sus vientos apagaron las llamas.

Gracias a los dioses, la cueva no estaba tan oscura, asГ­ que ninguno de ellos perdiГі la capacidad de ver a sus oponentes. Ryker envolviГі sus brazos alrededor del cuello de la vampiresa y apretГі. Pisoteando sus piernas, la derribГі, pero mantuvo el control sobre su cuello. Con las fuerzas opuestas, le rompiГі el cuello.

Al arrojarla al suelo, se volviГі para ver a Maurelle apuГ±alando el extremo de la antorcha a travГ©s del pecho del vampiro macho. Se desplomГі en el suelo y se quedГі inmГіvil. Ryker tomГі el arma improvisada y hundiГі el extremo a travГ©s de la garganta de la hembra chupasangre. Con varios hГЎbiles movimientos de lado a lado, su cabeza rodГі libremente.

Sacudiendo la madera, arrojГі sangre y vГ­sceras por el extremo. No queriendo sostener algo tan vil, llamГі a su fuego y enviГі llamas lamiendo el extremo lo suficiente como para quemar la asquerosa mierda.

Brokk se acercГі a Maurelle y le rodeГі los hombros con sus brazos. "Eso fue rudo, belleza".

—"Ya no soy una flor marchita. Y, nunca lo seré de nuevo". La vehemencia de su voz era escalofriante, pero no era sorprendente. Ryker había visto su columna de acero en el momento en que entró en el comedor de la academia. Nunca hubiera dicho que era una flor marchita. Fue su fuerza interior la que primero le atrajo hacia ella. Por supuesto, su preciosa cara y su cuerpo curvado le ayudaron.

—"Recuérdame que no te haga enojar", bromeó Daine a continuación. "Vámonos de aquí".

Asintiendo con la cabeza, Ryker cruzГі los dedos con los de Maurelle y se dirigiГі a la salida. El orgullo brotГі en su pecho. Su Braveheart no era una flor marchita. Era feroz, sexy y decidida. Era la compaГ±era perfecta para un Rey Fae, y si Г©l tenГ­a suerte, la convencerГ­a de que merecГ­a tenerla.




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